REFORMA DE URGENCIAS DEL HOSPITAL MATERNO-INFANTIL.
GRANADA. 2008.
La solución que se propone parte de una situación previa de la que es necesario respetar algunos condicionantes, tanto de orden constructivo, como de relación con el interior del hospital, el espacio exterior y el acceso. La reorganización se realizará a partir de un vaciado previo, respetando la estructura existente, a la que la nueva distribución debe adaptarse.
Las Urgencias se ubicarán en el mismo nivel, el de planta baja, unificándose las entradas. Para ello se hace necesario ocupar un espacio delantero longitudinal, destinado actualmente a patio de iluminación de la planta semisótano.
La idea fundamental consiste en organizar sucesivas bandas paralelas a las fachadas, que resuelvan los distintos grados de relación entre el personal sanitario, ubicado en el interior, y los pacientes y sus familiares, provenientes del exterior:
Contiguo a las fachadas se libera un espacio perimetral que alberga el vestíbulo de acceso, la sala de espera de familiares y la espera de consultas de policlínica, y que permite accesos desde el exterior en cualquier punto. Las consultas organizadas en batería continua se sitúan a continuación, y tras ellas, agrupadas en diferentes ámbitos se ubican las áreas de trabajo y tratamiento. De esta manera las consultas hacen el papel de filtro entre interior y exterior, permitiendo la separación entre circulaciones necesaria para el buen funcionamiento del área, y trasmitiendo la luz proveniente de las fachadas, a este efecto una de ellas, la oeste, se acristala en su totalidad.
El diseño de las consultas se resuelve en función de los flujos de entrada y salida y de las operaciones que se realizan en su interior. Pero también buscando una transparencia que haga llegar luz al interior del Área, para ello se utilizarán separaciones acristaladas. La entrada se mantiene en la misma fachada donde estaba, aunque desplazada para enfrentarse al ascensor existente.