El contexto:

Si una palabra pudiera sintetizar la estrategia del proyecto frente a la problemática del emplazamiento esta podría ser la de integración.

Integración del grupo social que lo habita y del que en un futuro lo hará, pero también integración física del espacio urbano, hoy desagregado lugar de conflicto de dos diferentes estructuras urbanas en la presencia sesgada de la nueva autovía.

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Proyecto:

La organización de los usos que se requieren en planta baja responde a igual criterio de particularización de las diferentes circunstancias:

1) Frente al espacio público el edificio acoge un uso de actividades comunitarias y de relación. Un conjunto de espacios cerrados y abiertos hacia el parque en los que se incluyen sala usos múltiples, conferencias, reuniones, actos etc, sala de exposiciones, biblioteca y cafetería, así como un gran porche abierto al espacio público -y al lago que se propone como posibilidad de tratamiento de este espacio libre- que podrá acoger actividades diversas incluso, en su caso, de forma parcial el mercadillo que en la actualidad se instala.

2) En el lateral de la calle de servicio de la autovía se disponen, además de los accesos, los usos comerciales más ligados con la vía pública y el acceso rodado, recogidos espacialmente por una marquesina de protección, continuación del porche al espacio público, que así mismo genera un espacio cubierto de carácter más lineal que recoge todo el contacto con el exterior del edificio a nivel de calle.

3) En los bloques interiores que dan al espacio libre privado se disponen usos de carácter comercial, de equipamientos o de trabajo en los que se valora esta vinculación más directa con las viviendas y con el espacio libre privado como pueden ser guardería, gimnasio, despachos y oficinas profesionales, talleres artesanales  u otros que no necesitando el acceso directo rodado puedan verse favorecidos por esta situación de contacto directo con el espacio libre privado.